“La diversidad nos enriquece”, reza una frase popular. Y pensando precisamente en valorar las cualidades y habilidades que tienen todos aquellos con quienes diariamente compartimos entorno, desde la institucionalidad, grupos sociales y diversos líderes se trabaja cada vez más en generar espacios más amables para las personas con capacidades diferentes o en condición de discapacidad.

Fue un arrebato, una ocurrencia que se inventó alguien y creo que, mientras lo realizaba por primera vez, no se fueron a imaginar que fuera a impactar tanto. Pero ¿quién sería ese genio al que le debemos tantos regaños? Venga y ¿por qué iban y los vendían en las entradas de los colegios?

Mirar atrás como una oportunidad de ver nuevamente el avance y el camino recorrido, las caídas, los obstáculos, las lágrimas derramadas, y verlas como el impulso que nos permitió alzar el vuelo y resurgir como el ave fénix, aplica al pie de la letra en la vida de Sebastián Narváez. Hace 12 años, cuando resurgía de las cenizas y empezaba a recoger los frutos de años de lucha, se prometió que volvería a las calles, pero esta vez a llevar luz y brindar mejores oportunidades.